Más Frutas y Verduras


Beneficios de incrementar su consumo 

La Organización Mundial de la Salud recomienda que diariamente incluyamos 400 gramos de frutas y verduras, ya que un consumo adecuado de ellas nos ayudará a prevenir enfermedades cardiacas, la diabetes o la obesidad, si son parte de una alimentación baja en azúcares y sal. Las frutas y verduras aportan vitamina E, K, algunas del complejo B y son la única fuente natural de vitamina C. 

También podemos beneficiarnos con su alto contenido de agua, la cual nos permitirá eliminar toxinas; con la fibra podremos evitar el estreñimiento y combatir los altos índices de colesterol, mientras que sus antioxidantes nos ayudarán a retrasar el envejecimiento, y eliminar los radicales libres. 


Consejos para almacenar y conservar 

Debemos tener en cuenta que no todas las frutas y verduras pueden ir en el refrigerador ni pueden colocarse juntas. Por ejemplo, la manzana produce etileno que provoca que otros vegetales maduren más rápido, en especial los plátanos, así que no deben estar cerca. 

Algunos frutos y vegetales que deben estar a temperatura ambiente son los jitomates, naranjas, plátanos y calabazas, procura colocarlos en lugares secos donde no dé la luz del sol directamente. Una vez cortados, debes guardar los sobrantes en recipientes herméticos. 

Verifica que tu refrigerador esté funcionando correctamente en una temperatura entre los 3.5 y 5 grados centígrados. La mayoría de productos puedes colocarlos en bolsas plásticas que estén perforadas para evitar que el exceso de humedad los pudra. 

Las fresas y otras bayas duran pocos días, hazles sitio en la parte más fría del refrigerador e intenta consumirlas pronto, lava sólo las que tengas intención de comer. 

Cuando compres aguacate, ciruelas, kiwis, duraznos y peras que no estén maduros puedes dejarlos un par de días afuera hasta que estén listos y guardarlos luego en el refrigerador para que se conserven. 


Frutas y verduras de temporada 

Siempre hay que estar al pendiente de cuáles son las frutas y verduras que están en temporada, así te aseguras de que están frescas y de que las consumes en su mejor momento, cuando tienen mejor sabor y sus nutrientes están más concentrados. 

En julio podemos encontrar limones, mango, piña, papaya, pera, sandía, melón, uvas, tuna, plátano, granada, ciruela, durazno, manzanas e higos. 

En cuanto a las verduras, podemos comprar con confianza pepino, jitomate, zanahoria, nopal, lechuga, coliflor, acelgas, col, calabacitas, ejotes, aguacate y elote. 



¿Cómo las introduzco a mi dieta? 

Es algo muy sencillo en realidad, incluye una fruta en tu desayuno (sola, con yogurt, con el cereal), lleva contigo otra para cuando te dé hambre en la escuela o en la oficina, antes de comer consume otra pieza, acompaña tus comidas con una ensalada con lechuga, calabazas y frutas, haz una salsa con mango y chile habanero, pica jícama, zanahoria y pepino para comer con limón mientras ves películas, series o deportes, cena fruta un par de veces por semana. 

Trata de consumir todo con cáscara (lavado y desinfectado) pues allí está la mayor cantidad de fibra, no cortes las verduras antes de ponerlas a cocer y dales sólo el tiempo justo para evitar que pierdan sus nutrientes. 

Si la fruta ya está muy madura aún puedes aprovecharla, por ejemplo, un plátano que ya está más marrón que amarillo te puede servir para hacer un panqué, un licuado o helado. 

Congela fresas y otros frutos rojos para preparar smoothies, mermeladas o salsas para acompañar carnes. Las manzanas que ya tienen textura harinosa se pueden convertir en una deliciosa compota para una tarta. Si cortas la piña en trozos y la congelas, después podrás hacerte un batido, ponérsela a la pizza o agregarla a una ensalada.